En Jalisco viven 42 mil personas que hablan alguna lengua indígena

De acuerdo al último Conteo de población del año 2005, en Jalisco había 42 mil 372 personas de cinco años o más que hablaban alguna lengua indígena. La lengua más hablada era la wixaritari (huichol) con 12 mil 941 hablantes y la segunda era la náhuatl con 7 mil 664 personas.
Los hablantes de lengua wixaritari viven principalmente en Mezquitic y Bolaños con 9 mil 282 y 2 mil 301 personas, respectivamente, mientras que los hablantes de náhuatl residen principalmente en Zapopan y Guadalajara con 3 mil 560 y mil 491 personas respectivamente.
Un factor decisivo en estas cifras es la migración, ya que entre el año 2000 y 2005, 6 mil 215 hablantes de lengua indígena migraron a Jalisco procedentes en su mayoría de otro estado de la República.
Lo anterior lo informa el Consejo Estatal de Población (COEPO) en el marco de la celebración del día internacional de la lengua materna, que tiene como fecha el 21 de febrero. La celebración busca promover el pluralismo lingüístico y la diversidad cultural.
Del total de hablantes de alguna lengua indígena, 2 mil 856 personas no hablan español de los cuales el 32 por ciento son hombres y el 68 por ciento son mujeres.
De acuerdo a cifras del Conteo de Población del 2005, el 22.8 por ciento de la población que habla alguna de las lenguas indígenas son niños que tienen entre 5 y 14 años; 37.6 por ciento son jóvenes entre 15 y 29 años; 22.4 por ciento tienen entre 30 y 44 años; 10.7 por ciento se ubican entre 45 y 59 años y 6.5 por ciento, 60 años o más.
En general independientemente de la lengua indígena, los cinco municipios donde se asientan los mayores números de hablantes son: Zapopan con 9 mil 716; Mezquitic 9 mil 310; Guadalajara 5 mil 961; Tlaquepaque 2 mil 825; y Bolaños con 2 mil 430.

Del libro: Dos Décadas en el Desarrollo de Jalisco 1990-2010

Las últimas dos décadas son en cierto sentido emblemáticas, ya que abarcan los últimos diez años del siglo XX y el primer decenio del primer siglo de un nuevo milenio. En estos veinte años el mundo ha cambiado en forma vertiginosa: la globalización de los mercados, el uso creciente de Internet y de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, la desaparición del antiguo bloque de países socialistas, etcétera. A estos cambios, en México se suman otros más, como por ejemplo la transición a la democracia, la apertura comercial, la concentración de la población en zonas urbanas y el despoblamiento de muchas localidades rurales.
Por ello, es pertinente hacer un análisis con base en datos y hechos sobre lo que ha ocurrido en Jalisco en estas dos décadas, en áreas como educación, salud, medio ambiente, cultura, deporte, transporte urbano, economía, gobierno, seguridad pública, etcétera.
En este libro se presenta el análisis y reflexión de veinte expertos académicos jaliscienses, sobre los principales cambios ocurridos en Jalisco en los últimos veinte años en sus respectivas áreas de especialización. La mayoría de los autores titulares son miembros del Sistema Nacional de Investigadores, tienen una reconocida trayectoria y una amplia obra publicada, y son externos al gobierno del estado. Por todo esto garantizan una opinión independiente e informada.
Este trabajo contribuye a tener una mejor retrospectiva de las dos décadas pasadas en el desarrollo de Jalisco, lo que ayuda a valorar los logros y avances de la sociedad jalisciense, y las problemáticas persistentes que requieren del trabajo y participación de todos, empezando por la administración pública.
¿Cuáles son los principales cambios en Jalisco en 20 años? ¿Qué problemáticas persisten?

En Jalisco disminuyen las viviendas construidas con materiales precarios y naturales

En Jalisco la cantidad de viviendas con paredes de materiales precarios se redujo 34.5 por ciento en el periodo 2000-2008, al pasar de 7 mil 035 viviendas en esa condición a 4 mil 607 al final del período. Asimismo en este lapso de tiempo, se registró una disminución del porcentaje de viviendas con techos de materiales precarios y naturales, dándose el mayor descenso en las viviendas con techos de lámina de cartón al pasar de 14 mil 823 en 2000 a la cantidad de 6 mil 529 en 2008.
Esto lo da a conocer el Consejo Estatal de Población (COEPO) al presentar un análisis de la evolución del estado de las viviendas en Jalisco al comparar los resultados del Censo de Población y Vivienda del año 2000 y la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos en los Hogares del 2008; ambos realizados por el INEGI.
En términos generales entre 2000 y 2008 las viviendas en Jalisco tuvieron un ritmo de crecimiento superior al de la población, al pasar de un millón 394 mil viviendas en 2000 a un millón 617 mil en 2008; lo que se traduce en un incremento de 223 mil viviendas en el período con una tasa de crecimiento promedio anual de 1.87 por ciento, mientras que este indicador para la población fue de 1.23 por ciento anual.
Como resultado de la reducción en el uso de materiales precarios, se incrementó la cantidad de viviendas con materiales duraderos; por ejemplo el número de viviendas con techos de concreto, tabique ladrillo o terrado con viguería se incrementó en 295 mil en el periodo de análisis.
Algunos de los materiales que se usan como pared o techo en las viviendas con materiales precarios o naturales son lamina de cartón, lámina de asbesto y metálica; material de desecho, carrizo, bambú y palma, embarro y bejareque. El uso de este tipo materiales está ligado en general a la falta de recursos económicos, aunque en algunas zonas del estado existen otros factores, de índole cultural, climática y de disponibilidad de ciertos materiales naturales. En contraste, los materiales duraderos para paredes son madera, adobe, tabique, ladrillo, block, piedra, cantera, cemento y concreto; mientras que en los techos se utilizan materiales como teja, concreto, tabique, ladrillo y terrado con viguería.